Desde hace ya varios años ha surgido una tendencia para preparar café frío, se trata del cold brew coffee o infusión de café frío.

Consiste en una extracción prolongada de las propiedades del café con agua fría o a temperatura ambiente, con la finalidad de obtener una infusión que pueda tomarse al frío y añadir hielo para hacerla refrescante.

La extracción por infusión debe tardar entre 12 y 14 horas, contrario al método tradicional de preparación de espresso que en 25 segundos extrae las propiedades del café con agua en altas temperaturas. Este tipo de extracción genera como resultado final un café menos amargo y ácido pero bastante intenso en sabor.

El cold brew coffee requiere de una prensa francesa, agua y hielo. La proporción de los ingredientes es de 50 gramos de café por 500 mililitros de agua a temperatura ambiente. Se recomienda utilizar café recién molido con una textura de molienda media gruesa o arenosa.

Su preparación es bastante sencilla:

· Se colocan los 50 gramos de café molido en la prensa francesa.
· Se vierten 500 ml de agua a temperatura ambiente.
· Se remueve la mezcla.
· Se coloca la tapa de la prensa francesa sin bajar el émbolo.
· Se guarda la infusión en nevera por 12 a 16 horas

Pasado el tiempo en nevera, se sirve la infusión en un recipiente con hielo sin bajar el émbolo de la prensa francesa para evitar remover las partículas de café asentadas en el fondo. Puedes ingerir la cantidad que desees y reservar el resto de la infusión en nevera por hasta 7 días. ¿Te atreverías a preparar cold brew coffee en casa?