Recientemente, se realizó el Segundo Campeonato Nacional de Baristas, en el cual se eligió al primer representante de Venezuela para el World Barista Championship (WBC).

Cesar Bermejo es Coffee Consultant y parte del equipo organizador de la competencia, con amplia experiencia en el barismo, pues representó a Panamá en 2017 y 2019 en el Mundial de Baristas. Siendo el primer venezolano en representar a otro país en una competencia internacional.

Dada su experiencia nacional e internacional, Cesar ofreció sus impresiones acerca del desempeño de los baristas y del Segundo Campeonato Nacional en vísperas del WBC.

 

¿César, tomando en cuenta que conoces las competencias internacionales cómo ves el nivel del barista venezolano?

El cambio entre el año anterior y este ha sido abismal, siendo la competencia del 2022 una versión no oficial, ayudó a que los competidores entrenaran mucho más de la forma en que usualmente se hace para un campeonato mundial.

Esto es como un deporte de alto rendimiento, hay entrenadores, patrocinio y una inversión de tiempo y dinero importante, cada uno de los baristas se dedica a mejorar su técnica más que al barismo como oficio.

Muchos de los baristas que compitieron este año también lo hicieron el año anterior, hicieron el trabajo, consiguieron su patrocinio y entrenaron. Si bien es cierto que tenemos un atraso importante respecto al ámbito internacional, estamos llegando a la competencia mundial con consultores y coaches que vienen de afuera.

Para este mundial tenemos el distintivo de ser la novedad. Por lo general conociendo los países participantes se espera los orígenes de café que utilizan cada uno de los campeones nacionales, entre ellos, café de origen africano, colombiano, panameño, pero, el café venezolano hasta donde recuerdo nunca se ha escuchado en una competencia mundial.

 

¿Qué significa para Venezuela ingresar en el World Barista Championship?

La verdad que es una felicidad y un sueño hecho realidad. El WBC es un evento con más de 20 años, Venezuela estuvo rezagado todo este tiempo, yo tuve la dicha de ser el primer venezolano en ir a un mundial en 2017 y 2019 representando a Panamá.

Este año también el Campeón Mundial de filtrados es venezolano representando a Chile, digamos entonces que desde años recientes el camino venía preparándose. Esto también es gracias al esfuerzo de Caracas Quiere Café, Grupo Giorgio y la producción de Esteban Marotti.

 

¿Qué valoración le das a la asistencia de Héctor García como jurado representante de la Specialty Coffee Association?

Me impresiona el nivel de desarrollo que genera en la industria este tipo de actividades. Al traer una persona que se dedica no solo al café, sino a las competencias, beneficia no solo la experiencia de los baristas sino también de los jurados venezolanos.

Para mí fue una experiencia que viví de primera mano, calibrando y practicando durante una semana, en jornadas de al menos 12 horas probando café, lo que nos deja un aprendizaje increíble.

En este tipo de competencias las personas se centran en el ganador actual, pero en realidad esto funciona más como un proyecto de construcción del café nacional y la marca país.

 

¿Cómo evalúas la evolución de Caracas Quiere Café?

Creo que es un tema de enfoque, en el mundo del café el consumidor se vuelve más exigente, por ende cada uno de los elementos en la cadena de valor se deben convertir en alguien más exigente.

Pienso que con cada edición el evento ha ido puliéndose en el aspecto de tener y ofrecer un mejor café y eso se ha visto reflejado incluso en las competencias. Pasamos de tener competencias amateurs a tener competencias oficiales avaladas por la Specialty Coffee Association y la World Coffee Events.

 

¿En tu experiencia, cuál es la recomendación para nuestro representante en el WBC? 

Se requiere de la implementación de una fórmula que incluye un equipo, patrocinio, especialistas en competencias de café, un excelente café y mucho entrenamiento. Esto es un proceso de largo plazo que lleva muchos años y formación, los campeones mundiales tienen al menos 5 o 6 años compitiendo.